La prueba sanguínea que se utiliza para evaluar el riesgo de enfermedad aterogénica del corazón y arterias periféricas. Las concentraciones específicas de ciertas apolipoproteínas también se asocian con otras enfermedades como la enfermedad de Alzheimer, la hipercolesterolemia familiar, algunos tipos de insuficiencia renal, el síndrome nefrótico y la depleción estrogénica en mujeres de más de 50 años de edad.