Es un área natural protegida de México que se ubica en la cordillera Neovolcánica, dentro de la ciudad de México, en la delegación Iztapalapa: fue declarada parque nacional en 1938. El Cerro de la Estrella es un volcán extinguido de interés geológico y la zona es importante para el estudio de las tradiciones aztecas. Presenta un clima templado subhúmedo y una vegetación producto de la repoblación forestal con eucaliptos. Es una de las áreas verdes del Distrito Federal y uno de los parques con más inadecuados usos del suelo: agricultura, asentamientos humanos, pastizales inducidos, panteón municipal, extracción de materiales pétreos y basurero. La fauna se compone básicamente de pequeños roedores. En la parte alta hay un yacimiento arqueológico, lugar de celebración de la ceremonia del fuego nuevo, la cual revestía gran importancia para los aztecas o mexicas.