Flora Iberica: Hierbas perennes y tuberosas, acaules. Tubérculos globosos. Hojas numerosas, erectas, pecioladas, precedidas por 1-varios profilos, papiráceos, acuminados; pecíolos alados, provistos de una vaina basal que se abre progresivamente; lámina doblemente pedatífida, lóbulo anterior oblongo, lóbulos posteriores 6- 12, en disposición helicoidal desde los basales a los superiores, que son erectos; nervadura de cada lóbulo pinnada y conectada por un nervio submarginal. Inflorescencia en espádice, rodeado por una espata pedunculada; pedúnculo de menor longitud que los pecíolos; espata con una parte inferior tubular y otra distal ± lanceolada, acuminada, refleja; espádice de menor longitud que la espata; apéndice cilíndrico, de longitud mucho mayor que el resto del espádice, también reflejo, con un intenso olor pútrido, enteramente cubierto de estructuras setiformes que gradualmente se van haciendo más grandes hacia la base del apéndice. Flores fértiles en el interior del tubo; las femeninas insertas en la parte basal, las masculinas por encima de ellas, ambas en varias filas formando un anillo cilíndrico, separadas por 1-varias filas de estructuras estériles tubulares (pistilodios); las masculinas con los estambres libres; antera única, sésil, con conectivo inconspicuo, que se abre mediante fisura longitudinal; las flores femeninas con ovario unilocular, con numerosos rudimentos seminales; placenta apical con 3-4 rudimentos seminales, la basal con 1-2; región estilar de mayor anchura que el ovario; estigma redondeado. Infrutescencia formada por bayas densamente agrupadas, globosas, con los restos del estigma hundido. Semillas ovoides, lisas o rugosas, pardas; estrofíolo ± cónico, amarillento; endosperma feculento y embrión recto.