El proceso para identificar el sexo de un individuo basado en la localización del cromosoma XY en las células de los varones, o de los cuerpos de Barr en las células femeninas, o en la distinción de caracteres sexuales secundarios y variaciones esqueléticas entre los sexo.
En biología, si el espermatozoide que fecunda el óvulo es portador del cromosoma X el cigoto resultante dará lugar a una hembra (XX) y si el espermatozoide que fecunda al óvulo es portador del cromosoma Y el cigoto dará lugar a un macho (XY); en los seres humanos el sexo del recién nacido depende del tipo de espermatozoide que realice la fecundación (véase sexo): la probabilidad de que nazca un niño o una niña es exactamente la misma.
En botánica, se aplica a un conjunto de fenómenos genéticos y del desarrollo que son causa de la diferenciación de un individuo hasta convertirse en uno u otro sexo (dioecia) de su especie, o hasta reunir en sí ambos sexos (monoecia); la determinación del sexo se dice genotípica cuando la causa de la misma radica en los genes, y las circunstancias en que se desenvuelve el individuo tienen poca importancia; en cambio, se califica de fenotípica si los genes de ambos sexos están equilibrados y tienen la misma o casi la misma valencia, de suerte que el sexo del individuo desarrollado depende de acciones mesológicas que actuaron durante su desenvolvimiento (véase genética) (J. H. y S.).