parque nacional de la Caldera de Taburiente
Es un espacio natural protegido español situado en la isla de La Palma, perteneciente a la provincia de Santa Cruz de Tenerife, en la comunidad autónoma de Canarias. Fue declarado Parque nacional el 6 de octubre de 1954. Fue declarado también por la Unión Europea como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). La ocupación humana de la Caldera de Taburiente es anterior a la conquista; era uno de los 12 cantones o reinos guanches de La Palma, cada uno gobernado por un mencey. El cantón correspondiente a la Caldera se denominaba Aceró y su mencey recibía el nombre de Tanausú. Sus habitantes vivían del pastoreo y la recolección de frutos. Alonso Fernández de Lugo, tras varios intentos fallidos de penetrar en el cantón de Aceró por el barranco de las Angustias, logró capturar a su rey Tanausú mediante una estratagema y ocupar el cantón y el resto de la isla en 1492. En 1557 se crearon las Haciendas de Argual y Tazacorte, que actualmente forman una comunidad de propietarios, con derecho de horas, minutos o segundos sobre la preciada agua de la Caldera de Taburiente.
La Caldera de Taburiente constituye una depresión de gran extensión, una de las mayores del mundo, y de origen erosivo que está rodeada por un circo de montañas volcánicas de unos 8 km de diámetro. El parque tiene una variación de altura de 2.000 m, desde los 400 m del barranco de las Angustias hasta los 2.426 m de El Roque de los Muchachos. Otras cumbres presentes en el parque son el Pico de la Cruz, el Pico de la Nieve y la Punta de los Roques. El interior de la Caldera se encuentra surcado por profundos barrancos, entre los que aparecen unos elementos característicos denominados roques, enormes monolitos rocosos como el roque Idafe. Existen dos cuencas hidrográficas principales, la de Taburiente y la de Almendro Amargo que se fusionan en Dos Aguas, en el inicio del barranco de las Angustias, única salida natural de la Caldera. Numerosas fuentes, manantiales y cascadas abundan en el parque, constituyendo un elemento característico de su paisaje.
Este espacio natural cuenta unas 380 especies vegetales, entre las que se encuentran un gran número de endemismos. La gran variación de altura existente en el parque provoca la existencia de comunidades de vegetación bien definidas. El pino canario (Pinus canariensis) es la especie arbórea dominante; se trata de una conífera de porte elevado y corteza pardo rojiza que presenta las acículas reunidas en grupos de tres. Los pinos suelen estar acompañados por especies como el amagante (Cistus symphytifolius), un arbusto de flores rosadas; el brezo blanco (Erica arborea), con sus abundantes flores blanquecinas; el codeso (Adenocarpus viscosus), en los pinares situados a mayor altitud; el escobón (Spartocytisus filipes), en las zonas más bajas; el tajinaste azul (Echium gentianoides), o el faro (Gonospermum canariensis). En las zonas rocosas y en las paredes escarpadas destacan plantas crasas como Carlina falcata, Senecio palmensis, Rumex lunaria, o diversas especies de bejeques (géneros Aeonium y Greenovia), con sus grandes rosetas de hojas carnosas. La vegetación propia de las cumbres incluye especies como el codeso, que ya no aparece acompañando a los pinos; el cedro canario (Juniperus cedrus); el retamón (Genista benehoavensis); la retama (Spartocytisus supranubius); la violeta (Viola palmensis) o la pajonera (Descurainia gilva). Las aves son los principales representantes faunísticos del parque, entre los que destacan la paloma rabiche (Columba junoniae), el canario (Serinus canarius), el bisbita caminero (Anthus berthelotii); la chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax), el ratonero (Buteo buteo), el cernícalo (Falco tinnunculus), o el petirrojo (Erithacus rubecula). En la Caldera de Taburiente viven también 3 especies de murciélago y 2 de reptiles: el perenquén (Tarentola delalandii) y el lagarto tizón Gallotia galloti.