Dícese de la tirantez del pliegue sinovial; bandas de tejido que se forma en la articulación de la rodilla. Muchas personas presenta pliegues en tres o cuatro puntos de la rodilla sin mostrar síntomas; no obstante, cuando los pliegues se se tornan tirantes (por ejemplo, como resultado de un traumatismo en la rodilla durante la práctica deportiva) se puede endurecer y dañar la rodilla. Si el pliegue rotuliano medio (más probablemente) se torna tirante, se comporta como la cuerda de un arco erosionado la carilla medial de la rótula y el cóndilo medial del fémur, lo cual provoca dolor en la porción anteromedial de la rodilla y un chasquido cuando el pliegue salta por encima del extremo del fémur. Los síntomas reproducen los de otros trastornos de rodilla, por lo que el síndrome es muy difícil de diagnosticar. El tratamiento más útil consiste en hacer reposo y aplicar hielo, aunque a veces se recurra a inyección local de esteroides. En los casos que no responden al tratamiento conservador, a veces se produce a la exéresis artroscópica de los pliegues.